El respaldo de informacion en la nube tiene varias ventajas contra los discos externos.
Primero, tus datos están almacenados en la nube, no en un dispositivo físico concreto. No están tampoco en un único servidor, sino repartidos en diferentes servidores y sólo se juntan cuando vamos a consultarlos o descargarlos.
Por tanto, nuestros datos en la nube están a salvo de accidentes como incendios o inundaciones. Tampoco se rompen porque para desaparecer completamente tendrían que estropearse muchos servidores al mismo tiempo.
Los servidores de los data center, por otra parte, reúnen unas medidas de seguridad muy superiores a las que pueda tener cualquier empresa que trabaje con un sistema tan rudimentario como los discos externos.
Lo mejor de las copias en la nube es que están en una ubicación distinta al lugar en el que se generan los datos. Por tanto, te aporta un grado de protección muy superior, porque la información no está localizada.
Otro de los beneficios de la nube es su alta escalabilidad. No necesitas adquirir nuevos dispositivos externos, sino simplemente aumentar a un plan que te ofrezca más recursos de almacenamiento. Los datos se almacenan de manera automatizada y puedes programar tu backup como quieras.